Parece que tenemos todo, no hay motivos para poner “pegas”, pero falta algo: falta sentirse feliz y realizado, falta sentir la plenitud de la vida y la alegría. En otras ocasiones tenemos sentimientos crónicos de ser infelices. Por alguna razón, nos sentimos siempre infelices y no somos capaces de salir de ese círculo vicioso. Este es un momento adecuado para buscar un coach.
Si buscas constantemente la aprobación por parte de los demás; si nunca estas seguro de obrar bien, de estar acertado en lo que haces; si siempre dudas de si puedes o no… es un buen momento para empezar las sesiones de Coaching.
Con frecuencia te acompaña el miedo; temes por si puedes o no hacer algo, y también por lo que otros dirán o pensarán; o por si te aceptarán; o por este motivo o aquel otro asunto. Tienes miedo de ser tú mismo… intenta buscar soluciones durante las sesiones de Coaching.
No sabes cómo tiene que ser este camino, ni por dónde buscarlo, ni cómo recorrerlo… el Coaching puede ser un buen inicio.
Muchos se encuentran con este problema. Para tomar decisiones acertadas y buenas para nosotros hay que tener autoconocimiento, hay que conocer nuestro interior y sus necesidades, saber adónde queremos llegar y de qué se trata en nuestra vida (qué es lo más importante en nuestra vida)… el Coaching puede darte respuesta a esas y otras preguntas.
La vida es un reto incesante y es un arte hacerle frente. Si te sientes agobiado o asustado ante un futuro desconocido, si salir de tu zona de confort te tiene horrorizado, también es un buen momento para empezar el Coaching profundo y descubrir lo que se está escondiendo detrás de tus miedos.
También las cargas emocionales arrastradas durante años son un gran problema para muchas personas. Nuestras emociones intervienen en todas las situaciones vitales y en muchas de ellas pueden complicarnos bastante la vida. Si esto ocurre en tu vida… no esperes más. Empieza a gestionar tus emociones antes de que ellas te “gestionen” a ti.
El miedo es el peor de los consejeros. Puede paralizarnos por completo y obligarnos a tomar las decisiones más absurdas. Pero también puede convertirse en nuestro aliado. Todo depende de ti, y las sesiones de Coaching pueden ayudarte también en los momentos de miedo ante los cambios.
A cada uno de nosotros nos invade de vez en cuando la sensación de estar en un túnel, en una curva, la sensación de que algo se acabó, de que hemos perdido algo o nos hemos perdido a nosotros mismos. Esas sensaciones no son ni tan raras ni tan excepcionales. Durante las sesiones de Coaching transpersonal podemos descubrir ese “algo”’. Lo vamos a redescubrir o encontraremos otros valores que podamos vivir.
Todos somos seres maravillosos, dotados de gran potencial. Nuestro problema consiste en que muchas veces no somos capaces de verlo, ni nos conocemos ni nos comprendemos porque nunca hemos visto “con nuestros propios ojos” toda nuestra riqueza. ¿Quieres conocerla, verla, experimentarla y utilizarla? Una ayuda infalible es el Coaching..
Sí, también este problema puede ser el objetivo a perseguir durante el Coaching. Te puede ayudar a descubrir las causas de tus fracasos, descubrir sus “por qués” y “para qués”, te ayudará a verlo desde otro ángulo y a comprender lo que ocurre y qué hay que cambiar para poder construir unas buenas relaciones con los demás.
En el trabajo pasamos una gran parte de nuestra vida. Si no disfrutamos del trabajo, si este tiempo es un mero cumplimiento de obligaciones para recibir la nómina a final del mes, estamos sufriendo toda la vida y perdemos muchos años. Cómo encontrar un trabajo que guste, cómo cambiar de carrera, de empresa, de oficio. Ejercer con éxito, disfrutar del trabajo, ascender, mejorar el rendimiento, mejorar la colaboración en la plantilla; todo puede ser objetivo de un proceso de Coaching.
Comprendo que puedan surgirte dudas. Escríbeme o llámame sin ningún compromiso, no pierdes nada. En nuestro primer encuentro, sea presencial, telefónico o por escrito plantéame todas tus preguntas. ¡Vamos a aclararlas!
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